lunes, 14 de mayo de 2012

"EL AGUA Y EL NIÑO"






"EL AGUA Y EL NIÑO"


Introducción
El niño según sus experiencias puede acceder al aprendizaje acuático, siempre y cuando solucione algunos problemas. En caso de que haya tenido vivencias previan y estas fueran positivas se crea en él la necesidad de la actividad acuática, y esto a su vez, es importante ya que todo aprendizaje representa una respuesta a la necesidad; y si por el contrario, un niño no tiene ninguna experiencia, hay q basarse en una didáctica específica con el fin de que lo lleve a superar diferentes situaciones que pueden presentarse durante el aprendizaje.
Para un aprendizaje sin la mayor dificultad se propone desarrollar:
  • Aprendizajes afectivos y actitudinales.
  • El conocimiento del esquema corporal.
  • La educación del movimiento.
  • La formación acuática de base.
  • La habilidad acuática general y especial de la natación.
  • La independencia acuática.
  • La seguridad.


Contenidos mínimos a desarrollar:
1. La adaptación: es un proceso continuo, que se va logrando en forma permanente: comienza con la adaptación ambiental, para continuar en la vivencia acuática. Ya en el agua, la percepción de diferencias en el peso corporal, en el equilibrio, la visión, la audición, la respiración, son causas permanentes de adaptación. Si se realizan ejercitaciones adecuadas a la capacidad y necesidad del niño, aparece entonces la habilidad acuática que "bien elaborada" permite la iniciación del nado formal.

2. La horizontalidad: Cuando se habla de traslación acuática económica se piensa en las posiciones hidrodinámicas del cuerpo. En esta etapa del aprendizaje se busca que el niño niño logre la horizontalidad de su cuerpo, tanto en posición dorsal como ventral. Ambas se fundamentarán en el mantenimiento permanente del equilibrio del cuerpo, incluyendo además las múltiples posiciones que ofrece la actividad acuática.
Ya al llegar a los 5 años logra con éxito la flotación vertical y la lateral, tanto en situación dinámica como estática.


3. Los movimientos:
¿Por qué las piernas primero?:
    • Es habitual que las piernas sean protagonistas importantes en los primeros desplazamientos. Esto es sin duda porque el pedaleo primero, y luego el batido de crol se asemejan a la acción de caminar, donde el movimiento es alternado y continuo. 
    • Es muy importante incorporarlo en todas las situaciones: en la flotación ventral (batido de crol), en la flotación dorsal (batido de espalda), para emerger luego de un salto, para desplazarse luego de un impulso de piernas, etc.
    • Otra de las causas de porqué las piernas primero es la necesidad de usar elementos flotantes que se llevan con los brazos o las manos, y que favorecen el equilibrio del cuerpo durante las primeras ejercitaciones.
·         Las piernas y la patada de pecho:
      Antes de comenzar el aprendizaje de la patada de pecho, movimiento simétrico simultáneo, el niño debe conocer la flexo-extensión del pie y la sensación de empuje por apoyo de plantas y extensión de piernas.

    • Si partimos de la base de que ya a los 4 años trabajaremos claramente los empujes y extensión de piernas, un niño de 5 años podrá lograr la patada de pecho.
  • Las piernas y la patada de mariposa:
    • Como experiencia de movimiento es semejante al subir y bajar de la patada de crol, pero aparece la simultaneidad, que complejiza el movimiento.
    • De los 5 años en adelante, lo esperable es que no todos puedan, pero debe hacerse la propuesta: ¿Quién puede ...?.
  • Las piernas y los empujes:
    • Cuando el niño ha elaborado la percepción plantar y la extensión de las piernas está preparado para incorporar el empuje como un elemento más de su desplazamiento.
    • Será incorporado a ejercicios en posición vertical en parte playa, en posición horizontal desde el borde, para saltar al agua de pie o de cabeza desde el borde, etc.
¿Por qué el perrito?
    • Los apoyos alterno-continuos de recobro subacuático (perrito) son los que el niño elige en forma natural como movimiento de brazos para iniciar sus desplazamientos.
  • Los brazos y la brazada de pecho:
    • El niño aprende este movimiento con facilidad porque es un movimiento simétrico que realiza dentro del agua y que puede ver: ahí están sus brazos, los dos juntos, accionando para empujar el agua ... (3 años).
  • Los brazos y la brazada de crol:
    • Cuando ya está bien elaborada la horizontalidad del cuerpo y el niño puede mantener la cara en el agua para no perder la posición de nado, está preparado para iniciar el aprendizaje de este movimiento. (recobro aéreo y propulsión).
    • Esto se debe hacer en forma global y por franca imitación de un modelo: como papá, como el profesor, como Juan ...
    • Las repeticiones deben ser pocas, entre 4 y 6 movimientos. No habrá análisis de formas técnicas; lo que sí debe ser clara es la información intelectual: Nado crol cuando muevo las piernas y los brazos (4 a 5 años).


  • Los brazos y la brazada de espalda:
    • A partir de la flotación dorsal con movimientos de piernas, el niño puede iniciar el movimiento simultáneo de apoyo de palmas, empujando el agua hacia los pies.
    • El recobro aéreo y la alternancia del movimiento resultan complejos antes de los 5 años.
    • Es muy importante dar calidad a la traslación dorsal por movimiento de piernas (buena posición de la cadera y la cabeza) y recién entonces incorporar la brazada global (5 años).


  • Los brazos y la brazada de mariposa:
    • Empujo mucho y hacia atrás, con los dos brazos, los saco del agua y los llevo adelante otra vez ... sería una propuesta para un niño de 5 años, hábil acuático, que está de pie en parte playa y camina empujando el agua. Ve sus brazos, y es capaz de ejecutar el movimiento. Lo percibe como información motora global y lo identifica intelectualmente como brazada de mariposa.


  • La posición inicial de los brazos:
    • Ante cualquier acción acuática será la de extendidos adelante, ya que favorece la horizontalidad del cuerpo y, consecuentemente, la hidrodinámica.
    • Deberá incorporarse a todas las ejercitaciones: flotaciones, salidas del borde, entradas de cabeza, etc., a fin de lograr la automatización del gesto.


  • Detección de los errores motrices
  •  
    • El niño es ya independiente acuático: se desplaza, invierte su postura, se sumerge, se detiene para flotar; en una palabra, ya puede en el agua...
    • En función de todo lo que hace es común que cometa errores importantes para la futura técnica: llevar las rodillas al abdomen en su movimiento de batido, empujar con el empeine en la patada de pecho, hacer la brazada perrito con los brazos debajo del tronco y no extendidos delante del tronco, empujar el agua en las brazadas con el dorso en lugar de las palmas...
    • Ninguno de estos errores le impide hacer lo que se propone: jugar y estar en el agua.
    • Aunque sea difícil captar su atención, es responsabilidad del docente evitar la fijación de cualquier error técnico.
    • Lo esencial es diagnosticar el origen del error y hacer un retroceso metodológico, llegando así a la estimulación adecuada, para lograr el movimiento correcto.
    • Y además, ¿está el niño preparado para este movimiento, o debo esperar su maduración motora?


4. La respiración
En la etapa de adaptación-aprendizaje no es lo mismo el agua en la cara, que sorprende, agrede, molesta, desestabiliza el equilibrio, que la cara en el agua, ejercicio que contiene un buen nivel de adaptación. Partiendo de esta idea, el proceso de la respiración en función del nado estaría dado por el logro de los siguientes niveles de capacidad:

  • 3 años:
    • La cara en el agua.
    • Pausa respiratoria durante la inmersión.
    • Soplar la superficie del agua (hacer burbujas).
    • Al emerger, sacar la boca, soplar y aspirar.
  • 4 años:
    • Soplar por la boca en la traslación subacuática.
    • Durante el desplazamiento, aumentar la frecuencia de soplar y tomar, con respecto a los movimientos de brazos.
    • Combinar la habilidad respiratoria con los diferentes movimientos de brazos.
    • Combinar la habilidad respiratoria con todas las actividades: durante la flotación, al nadar, al saltar al agua y emerger, etc.
  • 5 años:
    • Iniciar el rolido de la cabeza (eje longitudinal) y aspirar - soplar buscando la coordinación del giro de cabeza y el movimiento de brazos durante el nado de crol global.
    •  Lo habitual en el niño es soplar por la boca en inmersión. Pero además de poder soplar, es importante que mantenga su habilidad de ojos abiertos para mirar y orientarse dentro y bajo el agua.


5. La coordinación:
Inicialmente, la coordinación de piernas, brazos y respiración no es organizada en cuanto a ritmo y continuidad. De 3 a 4 años es común ver que el niño mueve las piernas en forma constante y, con menos continuidad, los brazos. Por lo general, hasta los detiene para buscar apoyarse y sacar la boca del agua para aspirar.
Su habilidad aumenta llegando a elaborar movimientos continuos de brazos y piernas con una acción de aspiración cada 3 ó 4 ciclos de brazadas.
Finalizando la etapa de los 5 años llega a concretar armónicamente su desplazamiento: mueve los brazos y las piernas con continuidad e incorpora la aspiración-espiración de acuerdo a su capacidad individual.
6. La orientación:
Durante todo el proceso de ambientación y aprendizaje de movimientos, juegos, saltos del borde, logro de destrezas corporales, etc., la orientación se desarrollará tanto en superficie como en inmersión. El niño debe poder responderse:
 
  • ¿Dónde estoy?: En la parte profunda, en lo hondo, en el agua grande, en lo playa,en el agua chica...
  • ¿Hacia dónde voy?: Al borde, a la escalera...
  • ¿Cómo voy?: Por arriba, por abajo del agua...
  • ¿Cómo lo hago?: Con las piernas solas, con los brazos y las piernas...
Estos y otros son indicadores de orientación en su imagen corporal.



ADAPTACIÓN AL AGUA



ADAPTACIÓN AL MEDIO ACUÁTICO


Pedagógicamente es necesario tanto "vencer el temor al agua", es decir que el alumno sepa flotar correctamente, deslizarse, tanto en posición ventral como dorsal, zambullirse sin temor al agua y respirar perfectamente; como, buscar la "coordinación de movimientos", cuando el alumno coordine movimientos de los miembros superiores e inferiores, junto con la respiración y, más adelante, con el estilo completo.


En la década de los 80, Fernando Navarro en 1990 continúa indagando en el estudio del aprendizaje de las actividades acuáticas, insistiendo en que la etapa de aprendizaje abarca desde que el alumno parte de cero hasta que resuelve satisfactoriamente las tres progresiones clásicas:
Familiarización,

Respiración y

Propulsión,



Con el fin de que se pueda decir que un niño sabe nadar debe haber alcanzado los siguientes puntos:

    ·         Una completa familiarización con el agua.
    ·         Saber respirar correctamente.
    ·         Realizar una distancia mínima de recorrido.
    ·         Saber zambullirse.

      Albarracín y cols. (1993) abogan por desarrollar una primera fase denominada "adaptación al medio acuático", donde quedan contemplados los desplazamientos básicos y específicos del agua, ejercicios de flotación, exploración de este espacio, iniciación a la adaptación de la respiración en el agua, apneas en inmersión, etc. El siguiente paso metodológico es el trabajo de las habilidades motrices básicas (saltos, giros, lanzamientos, equilibrios, coordinaciones) y específicas (propulsión). En todos estos contenidos intercalan los juegos y actividades netamente recreativas



Algunas escuelas de natación se inicia con un trabajo basado en los juegos motrices acuáticos, en donde se busca un juego apropiado para el proceso de los alumnos a través de juegos, ya que los niños tienen problemas con la adaptación al medio acuático y con incapacidad para abrir los ojos debajo del agua; dichas situaciones son muy variadas en un grupo de niños, así como algunos tienen un buen nivel de destrezas acuáticas, otros son intermedios y se enfrentan con un nivel regular, al igual de aquellos que están en un nivel muy flojo, con nivel cero o muy bajo; estos juegos son:




·         Juegos de Coordinación Motriz: Estos juegos se fundamenta en que los niños a los 3 años pueden moverse en el agua con ayuda, hacia los 4-5 años controlan mejor la iniciación de un movimiento, las paradas y los cambios de dirección; a los 5-6 años dominan el equilibrio estático e involucran el desplazamiento en el juego, siendo al final de esta etapa, aproximadamente a los 9 años, cuando pueden relajar voluntariamente un grupo muscular, consiguiendo realizar movimientos coordinados.


Los juegos acuáticos que se utilizan son los siguientes:

1. Juegos de motricidad gruesa: hace referencia a la coordinación dinámica global, equilibrio, respiración y relajación.

2. Juegos de motricidad fina: son las coordinaciones segmentarias.

3. Juegos donde intervienen otros aspectos motores: como la fuerza muscular, la velocidad, el control del movimiento, reflejos, resistencia, precisión, confianza en el uso del cuerpo etc. 



·         Juegos de Estructuración Perceptiva: entre estos encontramos los siguientes:

1. Juegos que potencien el esquema corporal: conocimiento de las partes del cuerpo es un proceso, del nivel del cuerpo vivenciado (hasta los 3 años), al nivel de la discriminación perceptiva (de los 3 a 7 años) y al nivel de la representación mental y de conocimiento del propio cuerpo (de 7 a 12 años).

2. Juegos de lateralidad: se tendrá en cuenta que hasta los 5 años el niño utiliza las dos partes de su cuerpo de un modo poco diferenciado. En este sentido, los planteamientos lúdicos tendrán un carácter global y enriquecedor a nivel segmentario. Entre los 5 y 7 años, que es cuando se produce una afirmación definitiva de la lateralidad, seguiremos potenciando el descubrimiento segmentario y, por último, a partir de los 7 años, cuando se produce una independencia de la derecha respecto de la izquierda, será cuando el trabajo analítico y de disociación segmentaria cobrará más relevancia.

3. Juegos de estructuración espacio-temporal: es en esta etapa cuando el niño empieza a reconocer y reproducir formas geométricas, tomando conciencia de la derecha e izquierda y enriqueciendo sus nociones de arriba, abajo, delante, detrás, posiciones (dentro, fuera), tamaño (grande, pequeño) y dirección (desde aquí, hasta allá). Con todos estos recursos el niño podrá escoger otras referencias además del cuerpo y podrá situarse en otras perspectivas.

4. Juegos de percepción espacio-visual: percepción visual (partes-todo, figura-fondo, noción de dirección, orientación y estructuración espacial),

5. Juegos de percepción rítmico-temporal: percepción auditiva, ritmo, orientación y estructuración temporal, etc.

6. Juegos de percepción táctil, gustativa, olfativa, auditiva y visual

7. Juegos de organización perceptiva
  



De acuerdo a la diversificación de los niveles se empieza con la adaptación al medio acuático, siempre antes de aprender cualquier estilo, debido a que en un principio se requiere que un niño se ADAPTE al medio de una manera natural, sin artificios y reconociendo el elemento como uno más.
La etapa de la familiarización consiste en que un niño se habitúa al agua, sin temor, según va adquiriendo confianza empieza a tener un mayor dominio en el medio acuático, realiza pequeñas flotaciones, zambullidas, giros y apneas.



Se realizaran juegos de zambullidas, apneas, giros verticales, horizontales, recogidas de objetos del fondo, todo bajo el agua y con los ojos abiertos. Una vez conseguido este primer paso se pueden usar gafas para nadar, para ver mejor, o para bucear.
Lo más importante es que dicha adaptación no se vuelva una etapa crítica de aprendizaje, que es aquella en la que el niño está en la edad más importante para la asimilación de los mismos, donde si se estanca o entorpece esta, su aprendizaje posterior será mucho más dificultoso tardío y con secuelas posteriores.



“Si esta etapa crítica de adaptación al medio acuático se mutila, el niño verá mermada sus capacidades en el futuro.”

jueves, 10 de mayo de 2012

ESTILO BRAZA



ESTILOS DE NATACIÓN COMPETITIVA

ESTILO BRAZA



Se caracteriza por tener un movimiento simétrico de las piernas y los brazos pero tiene límites en su técnica que más adelante se va a explicar. Este estilo tiene una restricción adicional que consiste en que las manos de quien lo practica deben ser empujadas hacia el frente juntas desde el pecho y que los codos deben permanecer debajo del agua, en un ángulo de 90°.

En los últimos años ha sufrido cambios a diferencia de los demás estilos, es el tiene más formas técnicas; las competiciones internacionales son con distancias de 50, 100 y 200 braza, en las pruebas de estilo se nada en tercer lugar en las pruebas de 100, 200 y 400 metros, el estilo braza también se nada en los relevos de 4*50 y 4*100 estilos y se nada en segundo lugar. Es el estilo más lento en el nado competitivo. En este estilo es el que las piernas proporcionan la mayor fuerza para el avance.
Se puede decir que muchos bracistas nacen ya mas afines a este estilo sobre todo por su complicada patada muy diferente al resto de los estilos. Este nadado en su variante no competitiva, es usado por muchas personas por su eficacia energética, en cambio en la variante de competición la braza tiene un consumo de energía superior a de otros estilos. La moderna patada de braza en personas no preparadas puede conllevar dolores de rodilla.


A continuación se explicarán algunas TECNICAS de este estilo:

  • Patada de braza: Una vez en la posición inicial, los pies mediante la extensión de las rodillas efectúan un barrido hacia fuera-abajo-atrás intentando mantener una superficie de contacto del pie contra el agua lo mas grande posible. Para esto tiene que mantener la flexión dorsal y la rotación externa. La parte interna del pie y de la pierna son las que ofrecen la zona de contacto de propulsión. El movimiento termina con la extensión completa de la pierna. La apertura final de las piernas no debe sobrepasar los 45º, pudiendo ser algo menor.

 

  • Deslizamiento en la patada de braza: El momento de deslizamiento al final de la fase propulsiva que se puede apreciar perfectamente en la braza ondulatoria y en la braza plana deslizante. Las piernas en este momento se encuentran juntas, con los pies en flexión y rotación interna. La cadera más alta y con poca flexión. El cuerpo se encuentra ligeramente inclinado con la cabeza más alta que la cadera, y esta que las rodillas y a su vez las rodillas más altas que los tobillos.


  • Patada ascendente braza: o movimiento ondulatorio-ascendente de la patada braza, es un movimiento semi-ondulatorio de las piernas al final de la fase de propulsión y una vez que se encuentran juntas. Las piernas realizan una patada ascendente regida por la cadera a fin de ayudar a la ondulación del estilo y con el objetivo también de generar algo de fuerza propulsiva. Para ello el movimiento hacia arriba tiene que generarse en la cadera y transmite a lo largo de la pierna hasta el pie.



  • Recobro patada braza: los pies se dirigen hacia fuera y abajo, manteniéndose la flexión dorsal y la rotación externa; el movimiento acaba con las piernas casi extendidas, abiertas (45°) y con los pies en la máxima profanidad; a partir de este momento los pies se dirigen hacia dentro y arriba a la vez que rotan hacia dentro y realizan una flexión plantar, la cual no debe ser máxima, para evitar que esta acción produzca una reacción de hundimiento en las caderas; la patada acaba con las piernas en extensión cerca de la superficie del agua, juntas y con las plantas de los pies mirándose. El recobro: las piernas inician su flexión, a la vez que se van separando las rodillas; mantener los pies juntos y con las plantas paralelasa a la superficie del agua; en el último momento, cuando ya se encuentran cerca de los glúteos, rotan hacia fuera y se separan adoptando la posición inicial; en esta fase es importante que la flexión tronco muslo no se exagere durante esta fase.

  • Agarre brazos de braza: primera parte de la brazada, agarre, toma o preparación; si se mantiene el cuerpo quieto en el espacio las manos realizan un arco delante de la cabeza, con un movimiento semicircular, regido por los hombros, hacia fuera, atrás, abajo. El Angulo de azimut debe iniciarse en unos 30º para terminar en unos 50º. El nadador tiene que hacer que el movimiento hacia atrás gane magnitud a la vez que se realiza la curva. Esto se consigue con la rotación del antebrazo sobre el codo mientras la mano aumenta su giro hacia atrás progresivamente. Si tomamos como referencia la posición prona la mano tiene que tener un Angulo de 90º.  

  • Tirón brazos braza: es importante que al juntarse las manos, los codos no estén demasiado retrasados con relación a los hombros; los brazos siguen separándose a la vez que el codo se flexiona; las manos en este momento se dirigen hacia fuera y abajo, hasta que se alcanza la altura de los hombros, momento en que las manos cambian de dirección; los codos alcanzan una flexión de unos 100°; las manos se dirigen hacia dentro con las palmas en supinación con relación a la posición anterior; siguen su movimiento hacia dentro y adelante las manos, hasta que se juntan por delante de la cara.




  • Recobro brazos braza: las manos se juntan delante de la cara con las palmas hacia arriba, abajo o mirándose; los codos se aproximan también por delante de la cara, intentando que anteriormente no se llevaran demasiado cerca del cuerpo; los brazos se dirigen hacia delante y abajo con la menor resistencia posible, alcanzando la máxima extensión.
 
  • Coordinación en el estilo braza: se tiene tres tipos de coordinación: uno brazada con la respiración, dos la patada con brazada y tres la coordinación cadera con resto. La coordinación correcta es: brazada – respiración – patadarecobro.


  • Respiración: cabeza en estilo braza, se exige que la cabeza rompa la superficie del agua en cada ciclo de brazos, aunque según las normas no se obliga a respirar en cada braza, sin embargo la mayoría de los deportistas aprovechan para un toma de oxigeno. En pruebas de 50 metros, algunos dicen no tomar aire en todas las brazadas.



"El deporte no construye el carácter. Lo revela!!" Heywood Hale